Lakers 2-1 Celtics

Gracias a los 11 puntos en el último cuarto de Derek Fisher, los Lakers vencieron a los Celtics a domicilio y recuperaron la ventaja de localía que habían perdido en el juego 2. Desde el recordado "baby sky hook" de Magic Johnson en el 4º partido de las finales de 1987 que los laguneros no derrotaban a los de verde en Boston.

El partido comenzó muy mal para el conjunto dirigido por Phil Jackson. Los Celtics arrancaron con un parcial de 6-0 con puntos fáciles de contraataque y con un Kevin Garnett (25 puntos 11-16 TC, seis rebotes y tres asistencias) que se pareció más al del 2008 que al de los dos primeros juegos de esta serie. Restando más de siete minutos en el cuarto inicial y con los Lakers abajo por 12 a 5 Jackson pidió tiempo para serenar a sus pupilos. Tras el descanso todo cambió, y una racha de 21-5 le permitió a Kobe Bryant y compañía irse a la banca tras los primeros 12 minutos con una ventaja de 9 tantos.

Debido a los problemas de faltas de Ron Artest (otra vez ineficaz -2 puntos en 23 minutos-) la banca del equipo angelino se empezó a mover más rápido de lo habitual y eso hizo que Lamar Odom pueda redimirse de las críticas recibidas y encestar 12 puntos en un perfecto 5 de 5 desde la cancha.

En el segundo cuarto la diferencia llegó a ser de 17 a favor de los angelinos y el estadio quedaba enmudecido ante la ineficacia de su salvador en el juego 2, Ray Allen, quien tras todos los récords positivos conseguidos en el juego 2, en éste sumo negativos, finalizando con 0 de 13 de cancha que incluye 0 de 8 en triples!!!!!! (y esta vez no estuvo en problemas de falta).

En la segunda mitad todo fue distinto. El juego físico fue preponderante y las ofensivas de ambos equipos fue muy estática e individualista.

Acá comienza el show de D-Fish que consiguió 11 de sus 16 puntos en el último período ayudando a que Los Lakers se mantengan siempre al frente en el marcador. El co-capitán de 35 años fue el gran heroe de la noche (la mejor jugada fue doble y falta salido de una corrida en contragolpe que él sólo encaró ante tres Celtics que se abalanzaron a darle con todo). Fish terminó con 5 faltas, pero fue el mejor del partido, no sólo por su performance en el momento decisivo, sino porque anuló absolutamente a Ray Allen.

En la entrevista tras el juego se lo notó muy emocionado: "Amo este juego, amo a este equipo, amo a estos muchachos," dijo Fish a punto de quebrar en llanto. "Nada me hace más feliz que ayudar a mi equipo ganar." Y lo logró con creces.

Además de Fisher, nadie se destacó demasiado. A pesar de unos increíbles números (29 puntos 7 rebotes, 4 asistencias, 3 tapas y dos robos), Kobe no se encontró con sus tiros (encestó sólo 10 de sus 29 tiros al aro), pero sí en el juego intangible. Bryant lanzó tremendamente mal, pero dio la vida en cada jugada y defendió muy bien cuando le tocó hacerlo. Tanto Kobe como Fisher se encargaron de animar al equipo en los tiempos muertos, algo que cabe resaltar porque los que no ven los partidos y se quedan con la planilla estadística no pueden valorar estas cosas. Así se forjan los líderes y así se forjan los campeones, dentro y fuera de la cancha.

La zona pintada fue dominada por Doc Rivers y sus dirigidos, que vencieron 50 a 38 a los de Jackson en dicho lugar. No obstante, los visitantes rebotearon mucho mejor (43 a 35), tiraron mejor (44.7% en TC al lado del 43.8% de Boston), y perdieron menos balones (10 pérdidas de Boston y 8 de L.A.).

Otra vez la rodilla de Andrew Bynum nos trae dolores de cabeza. Tras bloquear un tiro de Kendrick Perkins, el pivot de 22 años cayó mal y se volió a resentir de su rodilla derecha, pero después continuó jugando aunque se lo notó más lento. Andrew finalizó con 9 puntos y 10 rebores en 29 minutos, en lo que claramente es su mejor serie en esta postemporada.

El catalán Pau Gasol tuvo problemas para defender a Garnett. Cada vez que el "cuervo" llevaba al español a la llave el resultado era: puntos para Boston. En ataque no estuvo participativo encestando 5 de 11 tiros de campo para finalizar con 13 tantos y aparte capturó 10 rebotes.

Por los Celtics, Rajon Rondo, que venía de hacer un triple-doble en el Juego 2, tuvo un juego muy discreto, con 11 pts, 3 rebs y 8 asists, en el cual no aportó practicamente nada. Boston estuvo liderado todo el tiempo por Garnett, ya que nuevamente Paul Pierce brilló por su ausencia en la mayoría del partido.

El resultado final de 91 -84 trajó aparejada la primera derrota de los Celtics en esta postemporada cuando su rival convierte 94 puntos o menos.

La gran vergüenza del partido fue el arbitraje, nuevamente. Hubo hasta tres jugadas en que los de gris debieron verificar sus cobros en las repeticiones, lo que hizo del encuentro algo muy poco atractivo, sobre todo si se tiene en cuenta lo mal que jugaron ambas escuadras. Es alarmente la calidad de los arbitros en estas finales, ya que en los tres partidos cometieron errores groseros a parte de pitar cualquier mínimo contacto y hacer los encuentros muy trabados, lo que perjudica el espectáculo. Definitivamente tiene que haber un recambio de los de grises para el año entrante.
(No vale gastar más tiempo y lineas en estos hombres).

Al partido no le faltó adrenalina ni clima de Finales, pero ninguno de los dos conjuntos estuvo a la altura de las circunstancias. Aún así, jugando mal y todo, los angelinos sacaron provecho de los cobros y el juego físico para mantenerse siempre al frente.

Ahora los Lakers ganan la serie 2-1 pero también tienen la ventaja de localía de ímpetu y de confianza. No hay que confiarse y para el partido del jueves hay que corregir los errores (principalmete que no se rotó bien el balón).
¿Cómo será el 4º partido?, es imposible saberlo ya que los tres anteriores fueron totalmente distintos entre sí, sólo esperemos que Kobe, Fish y compañía hagan una buena labor y pongan a los Celtics en jaque.

Go Lakers!!!!

2 juegos para la Redención Final

Fisher emocionado tras el encuentro



Resumen NBA