La peor manera de comenzar el 2011

Otra fea derrota para los Lakers, que luego de dos victorias en las que habían retomado su nivel habitual volvieron a caer por más de 15 puntos, esta vez fue por 104 a 85 ante un rival que ya los había vencido esta temporada, los Memphis Grizzlies. Mientras la serie parcial se balanceó 2-1 a favor de los Grizzlies, éste ya se está volviendo todo un duelo en la Conferencia Oeste. De los últimos seis enfrentamientos entre estos dos equipos, los Grizzlies ganaron tres, a parte de triunfar 5 veces en el Staples Center en las últimas 6 temporadas.

La mejor forma de definir el partido sería "Kobe Bryant vs Memphis Grizzlies". "Black Mamba" acarreó sólo al equipo, con una gran ofensiva y una muestra de entrega total, aunque por esto también se expuso a pérdidas de balón y centralización de las ofensivas, con el resto del plantel quedando aislado a situaciones mínimas de oportunidad para aportar. El astro terminó con 28 puntos (10/22 TC), 2 rebotes, 2 asistencias y 2 robos, aunque falló 6 de sus 7 intentos de triple y perdió 3 balones en los 30 minutos que estuvo en cancha.

Los dirigidos por Lionel Hollins ganaron los tres primeros períodos y para el inicio del cuarto ya estaba el asunto liquidado, a pesar de un parcial de 11-4 que acercó a los laguneros gracias a un gran momento de Kobe. Por esto, Phil Jackson sentó a todos los titulares temprano en el último cuarto, y ahí fue cuando los titulares visitantes finiquitaron la paliza ante los suplentes por una diferencia de hasta 26 tantos.

Se puede decir que a los visitantes les salió todo y a los locales no le salió una.

Los laguneros siguen sin encontrar la forma de incluir a Pau Gasol (10 puntos, 8 rebotes, 2 tapas y 5 pérdidas) en la ofensiva, no hay movimiento de balón ni de jugadores y pierden pelotas tontas, aparte de la ya conocida falta de pasión.

Prácticamente todos los de Memphis jugaron bien, pero se destacaron Rudy Gay (27 puntos -10/19 TC-, 5 rebotes y 3 robos), que estaba en duda para este partido porque venía de tener fiebre, Zach Randolph (21 tantos y 8 rebotes) y O.J. Mayo (15 puntos y 5 asistencias).

Marc Gasol contribuyó muchísimo para su equipo en la zona pintada, con 10 rebotes, 6 asistencias y 4 tapas, además de 4 puntos. Entre Randolph y Marc pisotearon a Lamar Odom (7 tantos, 7 rebotes y 2 tapas) y Pau, además de Ron Artest, que encima de no poder ante Gay tuvo el que quizás fue uno de sus peores partidos de esta campaña con 0 puntos (0/2 TC), 1 rebotes, 2 asistencias y 3 pérdidas. No obstante, Andrew Bynum tuvo otra buena actuación, con 9 puntos (4/8 TC), 11 rebotes y 5 tapas en 26 minutos.

Las claves del partido estuvieron en las pérdidas y en el movimiento del balón. Los Lakers incurrieron en 20 pérdidas (contra sólo 10 de la visita) que favorecieron al juego de contraataque que plantea el segundo equipo más jóven de la liga, dándoles 28 puntos por esta vía.

El movimiento de balón se vio sólo en un conjunto y eso es letal. Los Grizzlies repartieron 30 asistencias en 41 canastos de campo, contra sólo 13 en 33 por parte de los laguneros.

Una dura derrota en casa ante un equipo que se las viene haciendo difícil a los bicampeones en los últimos enfrentamientos. La zona pintada de este equipo es una de las más poderosas del Oeste, y le iba a hacer mucha pelea a la línea frontal lagunera, que es sabido que no está pasando por su mejor momento. Sucedió lo peor que podía suceder, potenciado por un nuevo mal desempeño de la banca que sumó 33 puntos con absolutamente todos los suplentes jugando al menos cuatro minutos (incluyendo el debut en cancha de Joe Smith).

El récord angelino ahora es de 23-11, y aún así el calendario se presenta favorable. 11 de los siguientes 16 partidos son en Los Angeles y este período previo al Juego de las Estrellas tiene pocos rivales duros, aunque de seguir a este nivel, los laguneros tendrán muchos de esas características sin importar ni el color ni el nombre de la camiseta de los que estén en frente.

Todo esto debería servir de lección para mejorar de cara a la postemporada; todavía se mantiene la punta absoluta en la División Pacífico, aunque se cayó al 4º puesto del Oeste y cada vez se está más lejos de los enrachados Spurs y los heridos pero resistentes Mavericks.

El próximo partido de Kobe Bryant y compañía será el martes ante los Detroit Pistons en el Staples Center. Por desgracia ya no puedo decir que es un partido fácil.

Go Lakers!!!

Resumen del encuentro